El buen momento que está viviendo el mundo del alquiler turístico en grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Sevilla invita al optimismo. Son muchos los particulares que optan por alquilar su segunda vivienda con fines turísticos. Si tú también eres uno de ellos, seguro que estás siempre algo inquieto por el estado de tu casa. Aunque los huéspedes sean de confianza o tengan muy buena puntuación en Airbnb, siempre puede pasar algo.
En Room to Rent somos expertos en la gestión de apartamentos vacacionales. Por eso mismo, te hemos hecho una guía para que sepas cómo afrontar los principales miedos a la hora de alquilar tu casa con fines turísticos.
Principales miedos al alquilar un alojamiento turístico y cómo solucionarlos
¿Van a cuidar de mi casa?
Normalmente, en el caso de un alojamiento turístico no debería haber problemas. Sabes que tus huéspedes no van a colgar cuadros o a cambiar el alicatado del baño. Sin embargo, un desconchón, una silla rota o una televisión averiada son desperfectos que siempre pueden aparecer.
Antes de nada, lo que debes hacer es cerciorarte de que los huéspedes no te den mala espina. La intuición es lo que vale en estos casos, es prácticamente imposible que «cales» a alguien intercambiando cinco mensajes de WhatsApp.
A pesar de todo esto, en Room to Rent te recomendamos que firmes un seguro de vivienda por lo que pueda pasar. Muchas veces, los anfitriones fijan una cantidad en concepto de fianza que se devolverá al finalizar la estancia; en tus manos queda tomar alguna de estas medidas.
¿Qué van a hacer con mi vivienda?
Cualquier anfitrión desearía que sus huéspedes fueran gente tranquila y que no den problemas. Sin embargo, puede pasar que les de por invitar a sus amigos y montar una fiestecilla en tu apartamento.
Si no quieres que el desfase llegue a tu vivienda, evita grupos de amigos en fechas muy señaladas (Nochevieja, puentes, etc.) y fija condiciones estrictas de estancia (nada de ruido, no fumar, etc). Así te ahorrarás más de un disgusto y tus vecinos podrán dormir tranquilos.
Por otro lado, puede pasar que los inquilinos se dediquen a subarrendar tu vivienda. En alguna ocasión se ha dado que un huésped ha reservado con mucha antelación en una fecha clave para alquilar la vivienda de nuevo. Ante estos casos poco se puede hacer, lamentablemente.
¿Pero cuánta gente van a meter aquí?
Establecer unas cuotas de personas que van a alojarse en tu vivienda ha de ser una prioridad. Aunque, por ejemplo, la Comunidad de Madrid va a establecer unos mínimos, siempre puedes elegir que tu casa aloje a menos personas. ¿Por qué? Pocas camas disponibles, más comodidad para los huéspedes… y más tranquilidad para ti.
Morosos, deudores y caraduras
En el mundo de los alquileres vacacionales hay de todo. También gente que quiere hacer un simpa. Por eso mismo, has de guardarte las espaldas ante estos indeseables huéspedes. Aunque algunas veces baste con un contrato verbal, siempre es recomendable tener los pagos por adelantado.
A día de hoy, las principales webs de alojamientos como Airbnb o Expedia piden pagos por adelantado. Esto supone dos beneficios: por un lado el anfitrión tiene la seguridad de cobrar (aunque cuando termine el alojamiento), y por otro es un ingreso por comisión para el portal.
Gestión de alojamientos vacacionales: mejor con ayuda
Aunque sabemos que la inquietud es intrínseca al alquilar un alojamiento vacacional, en Room to Rent podemos darte un poco más de seguridad. Con nuestro servicio de gestión de alojamientos vacacionales tendrás toda la tranquilidad de contar con el respaldo de una empresa seria, solvente y experimentada en el sector.
Los anfitriones que cuentan con nosotros reciben un informe recurrente para saber cómo va su vivienda. Y créenos: suele ir para mejor. Por eso mismo, son cada vez más quienes optan por nuestro innovador concepto de gestión de apartamentos.
Más tranquilidad y mayores beneficios para ti.