La vivienda turística, desde hace ya un tiempo, ha crecido exponencialmente como forma de alojamiento vacacional, en el mundo y propiamente en España, tanto para extranjeros como para españoles.
Alojamiento vacacional, la opción más elegida por los turistas
Según estadísticas de Familitur y Egatur elaboradas por Turespaña, 1 de cada 5 turistas españoles (en su mayoría) y extranjeros, pagaron 1 de cada 4 noches en apartamentos o viviendas de alquiler, suponiendo así 13,6 millones de turistas y 153,7 millones de pernoctaciones en España.
Por otro lado, según el Estudio de Opinión de los Clientes de VUTs realizado por la Asociación de Propietarios de Viviendas Turísticas (Madrid Aloja), el 92,31% de las personas encuestadas consideran que es un factor importante o muy importante que una ciudad cuente con este tipo de oferta de alojamiento, frente al 7,72% que dice que es poco o nada importante sobre su elección.
Esto se debe a la comodidad que pretende un alquiler vacacional de este tipo, ya que ofrece los servicios similares a un hotel, adhiriendo cocina, lugar de estar y otras ventajas que hacen a una estadía confortable. Justamente, según los encuestados, la principal razón es la de disponer de una mayor intimidad y espacio en el alojamiento, en un 82,49% de los casos, la posibilidad de tener una experiencia turística más intensa y de integración en los barrios en los que se alojan, según el 53%%, y en tercer lugar, para el 49,3% por el precio.
La vivienda turística incentiva la economía local
Este crecimiento en el sector turístico trae consigo un impacto económico anual de 940 millones de euros en bares, restaurantes, tiendas de barrio y ocio de cercanía, reflejando un gasto de 115,2 euros al día por visitante. Es decir, casi dos de cada tres comidas en bares y restaurantes del barrio (el 62,4%) y el 97,7% de compras en el comercio de proximidad.
De todas formas, se espera todavía, mayor crecimiento en el sector turístico, alcanzando 637.000 millones de dólares en 2022 a nivel mundial, lo que indica una proyección de crecimiento interanual del 48%, y unos 81.000 millones de dólares de ingresos en alojamientos privados vacacionales, solo un 2% por debajo de 2019. Para 2023, por su parte, se espera sobrepasar los niveles prepandemia, con un crecimiento de en torno al 5%, según el informe Mobility Market Outlook elaborado por Statista y presentado junto a ITB.
Una vivienda turística, entonces, no solo invita a relajarse, descansar y visitar en profundidad el sitio vacacional, sino que ayuda e incentiva, y mucho, a la economía propia del lugar, generando un impacto económico positivo.